¿Qué se esconde detrás de las "estelas químicas"?
Las estelas "chemtrails", o lluvia de nano-partículas de aluminio se ciernen sobre el hombre, los animales y la Tierra.
Las "chemtrails" son "estelas químicas", o condensaciones que dejan atrás los aviones, pero algunos creen que estas estelas son huellas químicas que de manera deliberada son rociadas de los aviones por razones desconocidas.
En tanto en Estados Unidos existe preocupación por el creciente número de pacientes con condiciones neurodegenerativas.
El número de pacientes de Alzheimer creció de 4.5 millones en el año 2000 a 5.4 millones en el 2012. Una de cada ocho personas de 65 años o mayor sufre esta enfermedad. Un incremento anual parece inevitable debido al envejecimiento de la población, pero los factores ambientales también juegan un papel importante.
El artículo llamado "Chemtrails, Nano-aluminio y los efectos neuro-degenerativos y del neuro-desarrollo", publicado por el Dr. Russell Blaylock, en la revista de la Federación Nacional de Salud, "Health Freedom News", advierte contra uno de los efectos peligrosos del ambiente: los chemtrails.
Blaylock, quien se retiró de la neurocirugía, para investigar, escribir y enseñar, comenzó a notar los chemtrails unos años atrás y escribió: "es particularmente preocupante que ahora existen muchos, docenas que cada día cubren los cielos".
Los chemtrails están compuestos de aerosoles, que generalmente son rociados por aviones jets sin pasajeros.
Lo que al principio parece estelas, se convierte en cintas de nubes que se esparcen haciendo que el cielo se vea nublado. Contiene tóxicos y substancias biológicas.
Blaylock concentra su atención en las nano partículas de aluminio como se menciona en la Parte 2 del artículo “Chemtrails sobre Las Vegas”, publicado el 26 de agosto de 2005 en el diario Tribune de las Vegas.
Los gobiernos no reconocen la existencia de los chemtrails, ni reconocen que sean una amenaza, pero su existencia sale ocasionalmente en los medios de comunicación. La estación de televisión KNBC de Los Ángeles, California, fue anfitrión de “Los Cielos Tóxicos” con Paul Moyer y de un reporte de las enfermedades en los niños y de las cantidades récord de bario y aluminio en el suministro de agua inmediatamente después que las estelas químicas fueron vistas encima de San Bernardino, California.
En agosto del 2005 el diario de Las Vegas Tribune publicó un reporte de dos partes, acerca de los chemtrails, estelas químicas, la enfermedad que causaron, y antecedentes de otras fuentes. El reporte de Las Vegas Tribune dice que en la página web de las Fuerzas Aéreas estadounidense llaman a los chemtrails “engaño de estelas químicas”, pero los científicos que trabajan en la base aérea de Wright Patterson, en Ohio, confirmaron al diario Columbus Alive, en Ohio, que ellos estaban involucrados en experimentos de rocío aéreo.
Uno de ellos involucró el rocío o fumigación de óxido de aluminio al calentamiento global y la fumigación de estearato de bario, que tenían que ver con la alta tecnología de comunicaciones militares.
Las personas que notaron problemas de salud, mortandad de ganados o en los cultivos, simultáneamente a la aparición de las estelas químicas, investigaron por su cuenta, analizando su sangre, tierra, agua y atmósfera para compararlas con las normas publicadas. Un compendio de ambos reportes anecdóticos y documentados están online en “Strange Days, Strange Skies”.
El film documental ¿Qué es lo que están rociando? fue producido por G. Edward Griffin, Michael Murphy, y Paul Wittenberger. Muestra el impacto que las estelas químicas tienen en el ambiente. Por ejemplo, la nieve en el monte Monte Shasta tenía normalmente siete partes por billón (ppb) de aluminio, pero en los últimos cuatro o cinco años aumentó a 61.000 ppb.
La tierra en el norte de California se está volviendo alcalina, y altera el sistema de raíces de los árboles. Los agricultores indican que las plantas ya no crecen en Hawái. Los pescadores encuentran menos insectos para los peces, y estos son algunos de los ejemplos de los documentales.
"Fiel a su especialidad, Blaylock elige escribir acerca de la neuro-toxina del nano-aluminio, uno de los principales ingredientes de las estelas químicas actuales. Él dice en su artículo que “estudios demuestran que estas partículas pasan a través de los tractos olfatorios que conectan directamente al área del cerebro que no sólo es la más afectada en la enfermedad de Alzheimer, sino que es la primera afectada en el curso de esta enfermedad”.
Las
nano partículas de aluminio son también fácilmente absorbidas por el
tracto gastrointestinal en contraste con las partículas de aluminio que
usualmente no son absorbidas. Debido a su pequeño tamaño, las
nano-partículas pueden atravesar la barrera hematoencefálica, penetrar
las membranas de las células, y alterar las mitocondrias.
Las nano-partículas pueden acumularse en la medula ósea, el bazo, los ganglios linfáticos, y el corazón
Las nano-partículas pueden acumularse en la medula ósea, el bazo, los ganglios linfáticos, y el corazón, como se reportó en el artículo “Las Nano-partículas manufacturadas de óxido de aluminio disminuyen la unión de las proteínas en la vasculatura del cerebro”, publicado en la revista de Farmacología, Neuroinmune en diciembre de 2008. Cuando se inhalan, inflaman los pulmones causando asma y otras enfermedades pulmonares.
El peligro a nuestros niños es más grande porque ellos están más al aire libre, son más pequeños, y no completamente desarrollados. Algunos de los consejos de la página web de Stop Spraying California, dicen que es mejor estar adentro de la casa en los días de rocío de estelas químicas. También se aconseja beber más agua, y comer helados.
Los alimentos quelantes, que lavan metales tóxicos fuera de nuestros sistemas, como el alga chlorella y el cilantro pueden ayudar. Y también recuerde mantener al sistema inmune en óptimas condiciones.
<
Comentarios